Finca Vega Real, el vino más disruptivo y atrevido de BODEGA VEGA REAL
Bodega Vega Real, perteneciente a Bodegas Barbadillo, lanza un Ribera del Duero atípico que no deja indiferente, más ligero y menos clásico, que atraerá a aquellos que buscan vinos expresivos y que les sorprendan.
Este nuevo tinto joven DO Ribera de Duero nace de viñedos de más de 70 años, situados a unos 850 metros de altitud, rompiendo con las reglas del clasicismo para aventurarse en los territorios de la rebeldía más encantadora.
Es una nueva interpretación de la Ribera del Duero y del viñedo viejo en clave de frescura y fluidez, y tan atrevido que no deja indiferente.
Esta es una de las 2.000 botellas que Bodega Vega Real ha elaborado y que este mismo miércoles tuvimos el honor de probar en primicia en la videocata organizada para medios de comunicación, y conducida por dos de los progenitores de la criatura: Luis Cuadrado, enólogo, e Ignacio Morán, Product Manager, responsable nacional de ventas y director regional de la Zona Centro y Levante.
De este modo, Bodega Vega Real, la bodega ubicada en Castrillo de Duero y perteneciente a Bodegas Barbadillo, ha presentado, de mano de la convocatoria de Rodolfo García de la Rosa y su equipo de Primar Comunicación, Eva Reneses y Patricia Valentín, junto a Tamara Díaz, del equipo de Marketing y Comunicación del Grupo Barbadillo, del que es directora Esther Gutiérrez, Finca Vega Real, un Ribera del Duero atípico y diferenciado.
Así, una vez puestos y dispuestos ante el ordenador, la copa, el sacacorchos, la libreta, el bolígrafo y la botella del propio vino, Ignacio Morán y Luis Cuadrado fueron desvelándonos algunas de las claves que hacen a este vino realmente especial.
PROYECTO “UNIVERSAL”, DISRUPTIVO Y EXCLUSIVO
Tras recordarnos el vínculo de la propia familia con la localidad de Castrillo de Duero y el Grupo Barbadillo –una de las diez bodegas históricas de nuestro país, fundada por un emigrante burgalés al que la vida le llevó a enamorarse al tiempo de una gaditana y de los vinos de aquellas tierras del sur–, con Vega Real –propiedad al 100% del emblemático grupo bodeguero desde 2005–, profundizaron en la filosofía de la bodega de Castrillo de Duero y su línea enológica, con vinos en los que la línea clave es la transmisión del terruño y el apego a la naturalidad frutal de la uva.
Y de este modo, consecuencia lógica de una trayectoria, nace con este vino, Finca Vega Real 2021, el proyecto disruptivo más interesante de la bodega de la DO Ribera del Duero. Nuevo vino y nueva línea. Como subrayó Luis Cuadrado –orgulloso de su “niño”, del que afirma “ha salido listo”– se trataba de hacer algo exclusivo y que al tiempo rompiera con lo establecido: “un gran vino joven con un proceso de elaboración complejo”.
Es un proyecto por afianzar y que necesita ser explicado, ya que, entre otros aspectos, va dirigido a un público muy exigente; con un PVP aproximado en tienda de entre 30 y 33 euros –más alto incluso que el reserva de Vega Real, pese a que su categoría oficial es de Crianza–; aunque ello, obviamente, se debe a la limitada producción del número de botellas y a la mayor selectividad tanto de viñedo como de barricas o un proceso de elaboración más caro –como el hecho de efectuar la fermentación maloláctica al mismo tiempo que la fermentación alcohólica–, pero que aporta aspectos diferenciales para profundizar en la personalidad única del vino.
El enólogo de Bodega Vega Real nos contó cómo la idea de hacer un vino joven pero con uvas de cepas viejas le surgió al hacer las catas previas de los mostos provenientes de estas viñas antes de entrar en barrica: “estaba muy bueno, me encantaba”.
Utilizando como materia prima viñedos exclusivos de más de 70 años situados a unos 850 metros de altitud de las fincas de Pradejón, Evaristo y Sardal –donde Luis Cuadrado selecciona y recolecta los racimos con la madurez perfecta para elaborarlo–, se presenta como una nueva interpretación del viñedo viejo de la Ribera del Duero en clave de frescura y fluidez.
Finca Vega Real, del que se lanza al mercado una tirada de tan sólo 2.000 botellas, es el vino más disruptivo y atrevido de la bodega, y está dirigido a paladares experimentados, que huyen de los vinos con mucha presencia de madera y buscan vinos más expresivos y singulares. En este sentido, como reconoció Ignacio Morán, han realizado algunas presentación previas a hosteleros de nivel y el feedback es muy positivo. Por cierto, la distribución del vino está encaminada directamente al sector Horeca y a tiendas especializadas de toda España.
UN VINO JOVEN PROCEDENTE DE VIÑEDOS VIEJOS EN ALTITUD
El territorio marca el carácter y se acentúa cuando hablamos de viñedos que datan de 1950. Podríamos decir que, más que pertenecer a la Ribera del Duero, Vega Real es parte de ella.
Tan atrevido que no deja indiferente, Finca Vega Real es un vino joven elaborado a través de métodos artesanales con uva tinta del país (tempranillo). Es el fruto de décadas de cuidados y protección de unas viñas de más de 70 años a través de una clara reinterpretación del “terroir” de la Ribera.
Este mimo y atención se extiende hasta el último paso del proceso de producción, en el que la pequeña bodega plasma su dimensión más humana, llevando a cabo procedimientos artesanales de manera pausada, escuchando el vino hasta alcanzar el producto final.
En palabras de Luis Cuadrado, el enólogo de la bodega: “Finca Vega Real es el resultado de mostrar el vino de uva de cepas viejas, intentando rebajar a mínimos las interferencias de la elaboración y paso por madera”.
REBELDÍA Y FINURA
Llegado el momento de la cata, las sensaciones que nos describe su creador quedan ratificadas. Su paso por barrica de roble francés –vinificación y posterior crianza de 8 meses en barricas de roble francés de 500 litros le aporta ligeros aromas tostados de madera, muy sutiles, enmascarados por la potencia de la fruta: grosella, mora y ciruela. Presenta un intenso color granate, de capa media-alta. con bordes violáceos y una gran estructura proporcionada por una tanicidad intensa, pero a la vez dulce y golosa, característicos de las cepas viejas.
Una vez en la copa, Finca Vega Real 2021 va expresándose a medida que pasa el tiempo. Según transcurre la videocata, gana en riqueza de registros. Percibimos ese buen nivel de acidez, que lo hace fresco y vivaz, tras una entrada en la boca amable, casi golosa, con un tanino presente pero elegante –de madera ya polimerizada, como nos explica su enólogo; al igual que esa frescura y pronunciada acidez, se consiguen en la misma vendimia, ya que su uva fue de hecho la primera que entró en la bodega, para aportar eses carácter–. Toda la fruta que aparecía en la nariz se subraya en su paso por boca; y su vivacidad se nos antoja preeminente, con algunos toques incluso herbales, mentolados y balsámicos que adornan su ánimo juvenil. Además, aun con carácter, es un tinto nada pesado y con un alcohol, 14º, que no molesta en absoluto.
De momento, reconocemos que nos dejó un grato y prolongado postgusto, con esos sutiles matices de la madera y un tanino que se agarra aún un pelín al paladar, pero que al tiempo demuestra y otorga larga vida por delante.
Esperamos, y esperamos, el resultado de la versión de las mismas viñas… de una partida elaborada al unísono pero que está experimentando una crianza más larga en madera, en barricas más convencionales de 225 litros. “Va a resultar una comparativa muy interesante; misma añada, dos versiones”, nos apuntaba Ignacio Morán.
Nuestra conclusión final es que es cierto; es un vino fácil de beber, un tinto con carácter pero nada pesado y en el que predomina un alma lozana y jovial. Un vino intergeneracional, ideal para todas las edades y para mentes –y sentidos adjuntos– abiertas al futuro.
NUEVA IDENTIDAD DE BODEGAS VEGA REAL
La puesta en valor del territorio y la ubicación privilegiada de la bodega es uno de los aspectos sobre los que Vega Real ha basado su cambio de imagen e identidad corporativa. De ahí la denominación “Finca” precedente al nombre de sus productos y gamas a partir de ahora, uno de los cambios más llamativos junto con la renovación de su logotipo.
Finca Vega Real es el primer lanzamiento de la bodega bajo la nueva denominación, con la que se pretende dar a conocer como una pequeña gran familia, con su enólogo –Luis Cuadrado– al frente, quien ha conseguido dotar a los vinos de esta bodega de gran personalidad gracias a su cuidado y medido trabajo a lo largo de los años desde la viña hasta la barrica.
Sobre Bodegas Vega Real
Fue fundada en 1997 y desde 2002 es parte de la familia Barbadillo. La bodega está situada en la localidad de Castrillo de Duero, el último pueblo de la provincia de Valladolid, en plena Milla de Oro de la Ribera del Duero. Vega Real interpreta la Ribera del Duero desde su mismo corazón, una tierra de contrastes, austera y apasionada, de la que salen algunos de los mejores vinos del mundo.
Su filosofía se centra en elaborar vinos a partir de un profundo conocimiento del terroir de zonas como La Aguilera, Gumiel de Izán o Moradillo de Roa, y una forma de trabajo artesanal y a pequeña escala que permite un exhaustivo control del proceso de elaboración. Vega Real es una bodega de dimensión humana compuesta por un reducido equipo, pero enormemente implicado. Son una pequeña gran familia y una vuelta a los orígenes de Barbadillo. https://tienda.barbadillo.com/bodega/vega-real/
Sobre Bodegas Barbadillo
Fundada en 1821 en Sanlúcar de Barrameda, Bodegas Barbadillo cumple más de 200 años continuando con una tradición centenaria como bodega 100% familiar productora de las denominaciones de origen Jerez-Xérès-Sherry, Brandy de Jerez, Vinagre de Jerez, y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda, que lidera con una cuota de existencias superior al 50%. También es pionera en la elaboración de vinos de la Indicación geográfica protegida Vino de la Tierra de Cádiz.
Actualmente Barbadillo se ha convertido en un grupo de gran proyección internacional que, además de desarrollar nuevos productos dentro de su zona geográfica, ha incorporado bodegas en otras Denominaciones de Origen como Bodegas y Viñedos Vega Real en la D.O. Ribera de Duero y Bodega Pirineos en la D.O. Somontano. Barbadillo cuenta con la primera y única certificación específica para el sector del vino en materia de sostenibilidad medioambiental, denominada Wineries for Climate Protection (WFCP).
Tras la reciente celebración de su bicentenario en 2021, Bodegas Barbadillo sigue rindiendo homenaje al paso del tiempo, cómo en cada uno de sus vinos se puede saborear el pasado, presente y futuro de la bodega. El paso del tiempo es el nexo de unión de todo lo que hoy significa Barbadillo. www.barbadillo.com.
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